(Foto: Camping de Savona, Italia. Verónica 2013 )
Miss Piss
Siempre sale líquida,
con su vestido holgado,
amarillo chillón,
como el grito
que dio su madre
la primera vez
que Miss Piss se
expresó libremente.
«Mother —dijo Miss Piss—,
I feel like flowing», y fluyó.
El viento
Préstame tus oídos ahora,
sin demora, dame tu olfato,
o me mato.
Es tanta mi premura,
tan suave la tersura
con la que he de huir
que, por detrás,
soplaré
y soplaré
y la angustia liberaré.
Camino abismal
Me mueve una fuerza irresistible,
una excavadora invisible
me abre el camino
al oscuro abismo sin fin.
Caigo sin remedio,
con más duda que miedo,
por una garganta negra
que escupe pero no saborea.
Ojalá pudiera quedarme,
mas algo me empuja a largarme,
aunque no atino a saber qué.
Caeré a un mar de dudas,
intuyo que más blanda que dura,
y emprenderé un viaje incierto,
pasado por agua,
antes de llegar al desierto.
Cuarteto de baño
En él entro sin más y ya me siento
con la vista al frente y sin un futuro,
pues es tan vacuo el sentir y no duro
ni un segundo en poner el cimiento.
Escato-lógica aplastante
—Me cago.
—Pues yo también me lo hago.
—¿Qué hacemos?
—Corre, ve primero.
—No, tú antes.
—Mejor tú delante.
—¿Nos lo jugamos?
—Oye, que me cago.
—¿A piedra, papel o tijera?
—Ya asoma la cabeza.
—Piedra.
—Papel.
—Has ganado.
—No, que vayas a por el papel, que ya me he cagado.